La noche del miercoles 14 de noviembre, Bogotá vivió un espectáculo inolvidable en el Movistar Arena, con The Smashing Pumpkins como protagonistas de un show electrizante que reunió a miles de fanáticos en un sold out contundente. La banda liderada por Billy Corgan ofreció un setlist diverso y cargado de emociones que abarcó clásicos, rarezas, y homenajes a otros íconos musicales.
La apertura con «The Everlasting Gaze» y «Doomsday Clock» marcó un inicio potente, recordando el sonido agresivo y melódico que define a la banda. La inclusión de «Zoo Station,» cover de U2, con un impactante solo de batería de Jimmy Chamberlin, dejó al público boquiabierto, mostrando la habilidad técnica del músico. Momentos clásicos como «Today,» «Tonight, Tonight,» y «Bullet With Butterfly Wings» provocaron coros masivos, mientras que temas más recientes como «Empires» y «That Which Animates the Spirit» conectaron con los seguidores de la nueva era de la banda.
Billy Corgan ofreció momentos íntimos con versiones acústicas de «Landslide» (original de Fleetwood Mac) y «Shine On, Harvest Moon» (un guiño a la nostalgia y al teatro clásico), generando una atmósfera especial que contrastó con la energía del resto del espectáculo. Los fans de larga data fueron recompensados con la interpretación de «Where Boys Fear to Tread,» tocada por primera vez desde 2013, y un impresionante cierre del set principal con «Cherub Rock,» adornado con fragmentos de clásicos como «Master of Puppets» de Metallica y «La Grange» de ZZ Top y Are You Gonna Go My Way de Lenny Kravitz
En el encore, la banda sorprendió con «Ziggy Stardust,» un tributo a David Bowie con James Iha en la voz principal, mostrando la versatilidad y el respeto por la historia musical de los integrantes.
El público bogotano respondió con pasión, creando una atmósfera mágica que la banda alimentó con interpretaciones cargadas de fuerza y sentimiento. Desde los riffs demoledores de «Zero» hasta el himno generacional «1979,» quedó claro por qué The Smashing Pumpkins sigue siendo una banda esencial en el rock alternativo. The Smashing Pumpkins demostró en Bogotá por qué siguen siendo referentes en la música mundial, ofreciendo un espectáculo que fusionó nostalgia, innovación y maestría técnica. Una noche que quedará en la memoria de todos los asistentes como un encuentro mágico con una de las bandas más influyentes de las últimas décadas.